CARTOGRAFÍA PARA MONTAÑEROS: ¡EN QUÉ ME DEBO FIJAR

A menudo insistimos en la necesidad de llevar en nuestras excursiones y salidas montañeras unas herramientas tan elementales como brújula y mapa (sobre estos elementos en SFLM se imparten cursillos). Mapas hay muchos y muy variados. De hecho un mapa es una representación de la superficie terrestre y puede ser desde un dibujo simple y esquemático hasta una carta precisa y completa. Su eficiencia como herramienta básica de orientación en montaña dependerá de su fiabilidad y del grado de información. Pasamos a tratar a continuación una serie de aspectos y elementos cartográficos que debemos considerar al adquirir los mapas para nuestras actividades montañeras:

ESCALA y EQUIDISTANCIA DE CURVAS DE NIVEL

Por el nivel de información que permite contener, por la exactitud de dicha información, por el área que puede abarcar en los formatos tradicionales (máximo de 100cms x 100 cms.), la escala más recomendable para la actividad montañera en general es la 1:25.000. No queremos decir que escalas diferentes sean inútiles, pero a nivel general, dicha escala es la que mejor se ajustará a nuestras necesidades. Un mapa a escala menor (por ej. 1:50.000) puede resultarnos más interesante para actividades como la bici de montaña, en las que los recorridos en una misma jornada abarcan un área bastante más extensa.
Por el contrario, escalas mayores, por ej. 1:10.000, resultan excesivas si no es para actividades cuya necesidad de información puntual sea muy grande. Con escalas tan grandes para una jornada excursionista media, casi con toda seguridad, necesitaremos varias hojas (mapas) diferentes, con el consiguiente engorro de manejo, necesidad de empalmes, etc.

El detalle de la información va a estar muy en relación con la escala. Esto se manifiesta fundamentalmente en el sistema de curvas de nivel. Frente a una equidistancia en estas curvas de 20 m. en los mapas 1:50000 o 1:40000, en los mapas 1:25.000 la equidistancia es de 10 m, lo cual ofrece una información topográfica mucho más precisa. No debemos olvidar que estamos tratando de montaña, donde la información altitudimétrica es fundamental.

COORDENADAS

Los mapas deben contener un sistema de coordenadas para la exacta y rápida localización de cualquier punto que se halle en la superficie representada. La posibilidad de definir la localización de ese punto es un aspecto que descuidan algunas de las cartografías dirigidas a montañeros. El sistema de coordenadas UTM (Universal Transversal Mercator) es el más interesante para cualquier actividad al aire libre. Este sistema de coordenadas UTM suele ir acompañado de la correspondiente cuadrícula kilométrica UTM, lo cual facilita enormemente la localización de los puntos. Varias editoriales, cuando anuncian «compatible con GPS» quieren indicar precisamente que incluyen dicha cuadrícula kilométrica y que facilitan así la introducción en el receptor de las coordenadas de cualquier punto. Si el mapa no dispone de la citada cuadrícula, la localización de cualquier punto, sobre todo si está en la parte central de la hoja, resulta muy imprecisa. Esto ocurre, por ejemplo, con los mapas que sólo incluyen el tradicional sistema de coordenadas geográficas (el de los grados, minutos y segundos).

TIPOS DE MAPA

La variedad de mapas es amplísima: mapas turísticos, de carreteras, temáticos, etc. Entre tal variedad los mapas excursionistas de tipo topográfico (relativos al relieve) son los más apropiados para nuestra actividad montañera. Estos, además de indicar de forma clara aquellos elementos más relevantes y necesarios para el montañero (senderos, itinerarios, refugios, cortados, toponimia, etc.) deben contener una información topográfica precisa y detallada. El conjunto de curvas de relieve puede ir acompañado de diferentes gamas de sombreados para acentuar la sensación de relieves, para diferenciar vertientes o cortados. En este sentido algunas editoriales están confeccionando mapas con unos efectos de relieve muy logrados e intuitivos. Las cartografías oficiales son en este aspecto las más fiables y en las que se basan los mapas de editoriales privadas.

INFORMACION NO TAN SECUNDARIA

Un buen mapa para montañismo nos debe aportar también información acerca de usos de suelo (tipo de vegetación) y un conjunto de signos convencionales (vías de comunicación, construcciones, poblaciones, límites administrativos, hitos de variada índole) que añadan información útil, ya no tanto para la orientación como para el conocimiento del entorno. Una buena y completa leyenda (conjunto símbolos e información técnica cartográfica que aparece en los márgenes de la hoja) es indicativa de un buen mapa. Así mismo, la información cartográfica que podemos considerar «técnica» (datum del mapa, declinación magnética, huso geográfico, etc.) es de gran ayuda para la navegación.

SUPERFICIES REPRESENTADAS

Por todo lo expuesto hasta ahora, los mapas oficiales de la series 1:25000 del Servicio Geográfico Nacional (SGN) responden a todas las recomendaciones. Sin embargo, al tratarse de series de hojas contiguas, suele ocurrir con mucha frecuencia que la zona de interés (macizo montañoso, sierra, cumbre, etc.) está representada en una esquina del mapa o en varios mapas diferentes. Esto lo suelen resolver los mapas de editoriales u otras entidades públicas que encuadran la zona de interés en un solo mapa de tamaño manejable.

TOPONIMIA

Uno de los elementos más deficientes de la cartografía oficial (elaborada por servicios cartográficos oficiales) es precisamente la toponimia. En este aspecto las editoriales suelen hacer un buen trabajo de documentación y de campo que se agradece en los mapas, ya que la toponimia puede ser un elemento muy relevante para el conocimiento del entorno y la designación de lugares.

OTROS ASPECTOS

Algunas editoriales confeccionan los mapas en materiales plásticos resistentes al agua, lo cual los hace más duraderos. El año de publicación y de actualización dará idea de lo fidedigna de su información, más si cabe en nuestro entorno, muy sujeto a alteraciones humanas (infraestructuras, pistas forestales, edificaciones, etc.)

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